Editorial
Al parecer la ambición de poder de la gobernadora Lorena Cuéllar por mantener como diputada plurinominal a la nuera del gobernador Alfonso Sánchez Anaya topo con pared en la Salta Regional del Tribunal Electoral de la Federación, al anular la decisión del Tribual Electoral de Tlaxcala (TET) de quitarle la diputación a Ana Bertha Mastranzo en el 15 Distrito y reconocer su triunfo que obtuvo el 02 de junio.
Esta mala decisión del TET de querer anular el triunfo de Ana Bertha Mastranzo en el 15 Distrito, todo para que lograra entrar por la vía plurinominal a Marcela González, solo evidencia la corrupción que prevalece en el TET para dictaminar y vender sentencias al mejor postor, sin importar los actos de legalidad que se supone debería acatar a cabalidad una institución como el TET.
Lo cierto es que ya la reputación del TET esta por los suelos y ya nadie le cree que sus sentencias sobre las impugnaciones emitidas por el pasado proceso electoral sean validas, al contrario, casos como el anular la elección en el municipio de Huamantla crea una precedente de alta corrupción y de total entreguismo al gobierno del estado y sin importar quebrantar la ley el TET solo esta de tapadera para hacer lo que ordene la titular del ejecutivo en Tlaxcala.
Con este mal trabajo del TET hace suponer que los ciudadanos dejarán ir a las urnas a emitir su voto en los próximos comicios electorales, debido a que su voto no es respetado y es manipulado al antojo del gobierno en turno.
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