Por Isael Pérez Olivier
Más allá del carisma y simpatía que pudieron despertar los aspirantes a un puesto de elección popular federal, además de la nada despreciable base electoral de Morena, que, según algunos expertos en la materia, estiman es de entre el 15 y el 20 por ciento de la intención total del voto, todavía no hay certeza de que en Tlaxcala ya esté resuelta la elección con “carro completo” ni garantizados los más de 550 mil votos que tiene que aportar Lorena Cuéllar Cisneros para la causa de Claudia Sheinbaum; lo que, aseguran, habría encendido las alarmas en el bunker morenista y fue el propio Andrés Manuel López Obrador, quien tuvo que realizar una visita relámpago a la entidad para ajustar la estrategia general de campaña, enfatizando la urgencia de apuntalar el Tercer Distrito Electoral Federal que está prácticamente en el abandono y a merced de la oposición.
Y esto es así, porque al parecer a la Gobernadora, solo le interesa sacar el resultado en el Segundo Distrito Federal, con su cuñado Raymundo Vázquez Conchas, que participa bajo el patrocinio del Partido Verde Ecologista. Y aunque la simulación siempre ha sido lo suyo, esta vez, Cuéllar Cisneros tendrá que hacerle “la chamba” a Irma Garay Loredo, que al duro y puro estilo de los Senadores releccionistas Ana Lilia Rivera Rivera y José Antonio Álvarez Lima, no hace ni el más mínimo esfuerzo para retener su escaño en el Congreso de la Unión, pues aseguran, que, lo único que ha hecho para reforzar a la 4 T en la región, es mandar a su esquirol alcalde con licencia de San Luis Teolocholco y candidato del Partido del Trabajo al Senado a gastar un poco de saliva y suela. Y nada más.
Misión, que por cierto, se ve prácticamente imposible para la actual mandataria estatal, pues se enfrenta no solo al rechazo de un importante bloque de la militancia de su partido, sino al enorme descredito entre la ciudadanía por su pésimo gobierno y sus peores resultados; lo que lastimosamente, pudo constatar la mismísima Claudia Sheinbaum cuando durante su única visita a la entidad como candidata a la Presidencia de la República, intentó arengar a los presentes con una loa a la Gobernadora y obtuvo como respuesta inmediata una andanada de rechiflas y hasta una que otra mentada de madre. ¡Ajá!, así de popular es la mujer más votada de la historia ¿Y todavía así quieren 550 mil votos?. ¿Por qué son así?. ¡Carajo!.
Y que conste, que ya en otro momento del proceso electoral, en el cónclave de Huamantla, que tuvo como escenario la finca de la empresaria de las muy buenas “carnes frías”, se habría quejado Lorena Cuéllar con el oriundo de Tabasco, porque la meta estaba muy alta y porque sentía que la estaban dejando sola, a lo que habría atajado la esposa del invitado especial, recriminándole, que la culpa era de ella, porque no supo incluir a los otros liderazgos. Y a lo dicho por la señora Beatriz, yo agregaría a título personal y si se me permite: “y por tener un desmadre de gobierno”.
Qué no es cierto y qué me excedí en el comentario. Bueno, quizás sea solo mí percepción, pero se imagina Usted, si se sometiera a una consulta de Revocación de Mandato ¿Qué respuesta obtendría Lorena Cuéllar de sus gobernados?. Sí, claro, el mismo; pero eso nunca lo sabremos porque estamos impedidos legalmente para solicitar ese ejercicio constitucional. Y ni pex.
Sin embargo, el próximo 2 de junio los tlaxcaltecas, si no en la elección federal por el efecto del remanente del fenómeno López Obrador; pero si en la local, tendremos la oportunidad de rechazar y reprobar la mala gestión de la mandataria estatal, y no solo eso, sino también, frenar el avance de otros muchos proyectos familiares, entre ellos: el que encabeza el hijo de su aliado, el exgobernador Alfonso Sánchez Anaya, que busca la capital del Estado; o el del vástago de su secretario particular Gelacio Montiel Fuentes, que busca la presidencia municipal de Tetla de la Solidaridad; o qué me dice, de la intención del genuflexo J. Carmen Corona Pérez, exdirigente de la sección 31 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, que quiere la alcaldía de San Jerónimo Zacualpan para su hija Sandra.
Así que, al parecer la mandataria estatal no solo ha perdido el voto sureño de los morenistas, sino su credibilidad ante el electorado en general, por lo que el macuspano se deberá conformar con un triunfo a secas para su proyecto del segundo piso de la 4T, y a lo mejor, sin el “carro completo” que busca en el Estado que a él le dio más votos, después de su natal Tabasco, en la elección del 2018. Y todo, gracias al efecto Cuéllar…
¡Se tenía que decir y se dijo!
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